La constructora, con presencia en 17 ciudades de Colombia, le ha permitido a más de 120.000 familias cumplir el sueño de tener vivienda propia
En Colombia las ventas de vivienda nueva valen más de 60 billones de pesos al año (4,1% del PIB) y el sector de la construcción representa el 13,5% del PIB y el 7,3% del empleo (1,7 millones de empleos). Además, este sector ha sido clave en la recuperación económica del país después de la pandemia; sin embargo, desde 30 años Amarilo le ha apostado a la construcción de un modelo social que fomenta la convivencia, el manejo de conflictos, la planeación y el liderazgo.
Una de las ideas centrales de la compañía ha sido desarrollar proyectos que sean ciudades dentro de la ciudad, espacios que no estén diseñados exclusivamente para vivir, sino también para trabajar, jugar y convivir, tener a 15 minutos de distancia un centro comercial, un hospital o un colegio. Esto se ha materializado en proyectos como Ciudad Verde en Soacha, Hacienda Casa Blanca en Madrid, Alameda del Río en Barranquilla y Hacienda Fontanar en Chía.
Por ejemplo, Ciudad verde en Soacha es un megaproyecto con 9 kilómetros de ciclorrutas, 57 hectóreas de parques y zonas verdes, un hospital, colegios, universidades y centros comerciales. Pero también está Lagos de torca, un megaproyecto de 1.803 hectáreas al norte de Bogotá que tiene todas las características de una ciudad sostenible, pues su desarrollo urbano se adaptará a la naturaleza.
“Nuestro objetivo ha sido desarrollar proyectos en los que exista un equilibrio entre lo social y lo ambiental, y que generen bienestar a las comunidades porque de ellas depende la transformación y el progreso del país”, aseguró el presidente de Amarilo, Roberto Moreno.
Una de las prioridades de este proyecto es restaurar la cuenca del Humedal Torca-Guaymaral, para devolver su hábitat a las especies que se vieron afectadas por la autopista que hoy atraviesa el humedal. Además, tiene una gran apuesta por la inclusión social al promover la convivencia de diferentes estratos socioeconómicos en un solo lugar: el 20% de las viviendas será VIP, 20% VIS y el resto No VIS.
Otro de los ejes centrales de Amarilo durante estos 30 años ha sido la construcción sostenible. Tienen certificaciones en eficiencia energética y diseño sostenible (LEED), construcción sostenible (EDGE) y en disminución del impacto ambiental y económico de las construcciones (CASA Colombia). A cierre de 2022 13 proyectos estaban certificados en construcción sostenible bajo estos sistemas.
Prueba de lo anterior es el proyecto Alameda del río en el que se intervinieron 183 hectáreas y se reutilizó el 70% del material. Asimismo, en aprovechamiento forestal y para compensar el impacto de la construcción trasladaron las especies de árboles más grandes y compraron 62 hectáreas en bosque seco tropical para sembraron 15 mil especies nativas.
Respecto a compromiso social, hasta el momento ha beneficiado a más de 457.000 personas. Tan solo el año pasado la constructora entregó a líderes de 46 ciudades del país, entre los 18 y 65 años, 100 becas para el programa Liderazgo transformador y diversidad que busca generar redes de colaboración para impulsar el desarrollo de las comunidades.
“Celebramos con todos nuestros grupos de interés estos treinta años y, al mismo tiempo, reafirmamos nuestro compromiso por seguir dejando una huella positiva, por crear bienestar y un mejor país para todos, con ciudades sostenibles como el legado de nuestro trabajo y de lo que queremos aportar para nuestras futuras generaciones”, agregó Moreno.
En estos 30 años Amarilo ha comercializado 406 proyectos en todo el país y actualmente tiene 85 proyectos activos, 32 salas de ventas y showrooms a nivel nacional y ha generado más de 13.000 empleos.