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Municipios de Antioquia con los nombres más curiosos de la región: Cañasgordas, La Ceja y más

Colombia cuenta con más de mil municipios o pueblos, algunos con nombres que generan risas y curiosidad. 

Los pueblos colombianos recibieron sus nombres de diferentes fuentes: personas ilustres, eventos importantes, leyendas o costumbres, o simplemente por situaciones independientes.  Algunas otras de estas denominaciones han nacido de la sencillez del lenguaje de sus primeros pobladores, de la historia de la colonización o a la espontaneidad con la que fueron poblados y, varios de ellos, despiertan la curiosidad.

Debido todos estos factores, relacionados con el nombramiento del territorio, muchos terminaron siendo divertidos o con una historia que vale la pena contar y, aunque en todas las regiones del país se encuentran pueblos con nombres «raros», la región antioqueña cuenta con algunos de los que más curiosidad generan en los colombianos.

Anorí 

Este municipio ubicado en el nordeste del departamento de Antioquia, recibió su nombre por la cacica Noria, quien pertenecía a los primeros pobladores del municipio.  Oficialmente, el municipio fundado en 1808 por Juan de la Rosa Estrada, fue creado como un lugar para la extracción de oro

Luego de su bonanza en la extracción del oro y el comienzo de la escasez del mineral, el municipio tuvo que basar su economía en otros productos como la panela, el café y el cacao.  Los habitantes de este municipio reciben el nombre de anoriceño o anoricense.  

Abriaquí 

El origen del nombre de este territorio, ubicado en el occidente antioqueño, tiene varias versiones. Sin embargo, según la teoría más popular entre sus pobladores, el nombre se remonta a la época de la colonia, cuando la señora María Centeno, minera de la zona, comandó a un esclavo diciendo “Abrí Aquí”, para ocultar el oro que transportaba hacia Urabá.  

La agricultura, la ganadería y las artesanías componen principalmente la economía del lugar. Sin embargo, algunos de sus años se vieron marcados por la riqueza de minerales y, al igual que el nombre del pueblo, los habitantes se conocen con un curioso gentilicio: abriaquiceño.  

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Cañasgordas  

Este municipio recibe su denominación gracias a los colonos españoles que llegaron al lugar, quienes encontraron hectáreas de guaduales sembrados. Los españoles desconocían el nombre de la planta, pero al tener un parecido con la caña de azúcar, decidieron llamarlas cañas gordas, qué tiempo después se convirtió en el nombre oficial. 

Cañasgordas basa su economía principalmente en la agricultura, cacao, café; la ganadería y la minería de oro.  Los habitantes del municipio reciben el nombre de cañagordenses 

La ceja 

La ceja, ubicado en el oriente antioqueño, recibe su nombre por la topografía; pues un valle rodeado de montañas, hace que parezca una ceja humana, mientras que la zona urbana podría considerarse como parte del ojo.  

Este municipio también suele ser conocido como el «pequeño vaticanito» por las 25 comunidades religiosas que se encuentran en su territorio.  

Su actividad económica se basa en la agricultura, con productos como el tomate de árbol, el plátano y el café. Además de ser reconocido por la producción lechera y la floricultura.  Sus habitantes son conocidos con el gentilicio de cejudos.  

Angelópolis 

 Quizá este nombre sea uno de los más curiosos y suene como si estuviese en otro país, pero Angelópolis se encuentra al sureste de departamento de Antioquia.  
 
Según la historia, Joaquín María Giraldo, uno de sus fundadores fue el que propuso el nombre, por una capilla construida en una montaña que denominaron “Los Ángeles”.  La minería de carbón, arena, arcilla y magnesio, además de la producción de café, caña y plátano son las principales fuentes económicas del municipio, y angelopolitano es el nombre que reciben los habitantes de este pueblo.   

Peque

Este territorio se caracteriza por su relieve montañoso y recibió su nombre por una tribu indígena llamada ‘Peque’. Cuenta con unos paisajes imperdibles y planes ecoturísticos inolvidables; pues gravita sobre el río Cauca.

El gentilicio de los que habitan este municipio antioqueño es pequenses, desde donde se ofrecen planes ecológicos sin igual.

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